Un Lope de Vega frío

LA ESTRELLA DE SEVILLA

La Compañía Nacional de Teatro Clásico vuelve a un Lope de Vega –de dudosa atribución, eso sí, pero no hay aquí espacio para discutirla– muy representado, aunque también inquietante, un texto que deja frío al espectador de hoy, una tragedia seca, sin concesiones. Las tropelías del Rey Don Sancho, que ve en el poder un vehículo para sus deseos más bajos, sin atender a razones ni barreras, no encuentran castigo.

Claro que al menos Lope sitúa a cada cual en su lugar moral, y algo es algo, dado el contexto de la época. Pero es difícil comulgar con un texto en el que el fénix tira de carpintería y oficio, e igual que lleva al monarca a encapricharse de la bella Estrella y a ser capaz de encargar un asesinato por ella, –hay, es cierto, un hermoso laberinto de azares crueles en el encargo– borra de golpe su pasión sin justificar el por qué.

Lope sitúa a cada cual en su lugar moral, y algo es algo, dado el contexto de la época. Pero es difícil comulgar con un texto en el que el fénix tira de carpintería y oficio

Como si se encontrara incómodo en este texto tan inasible, Eduardo Vasco abandona la frescura de sus últimos montajes –esas deliciosas Bizarrías de Belisa o Las manos blancas no ofenden– para adentrarse en una tragedia que aborda con austeridad minimalista: un escenario en maderas lisas y unos cubos del mismo material que dan algo de juego, junto a un vestuario contemporáneo en trajes grises.

Con los habituales buenos trabajos del reparto consolidado de la CNTC: Arturo Querejeta, como un atribulado Busto Talavera, el siniestro monarca de Daniel Albaladejo, o la fuerza de Muriel Sánchez, la Estrella del título, entre otros, el montaje se mantiene en la media de calidad que viene manteniendo esta CNTC, aunque no pasará a sus anales.


Autor: Lope de Vega. Versión: Eduardo Vasco. Director: Eduardo Vasco. Intérpretes: Daniel Albaladejo, José Vicente Ramos, José Ramón Iglesias, Muriel Sánchez, Mon Ceballos, Jorge Calvo, Arturo Querejeta. Teatro Pavón. Madrid.

Crítica publicada originalmente en La Razón, recogida en Notas desde la fila siete (Mayo 2009).

Estrellas Volodia

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